En la actualidad todas las empresas, de cualquier ámbito o sector, están tomando conciencia de la importancia de adoptar efectivas políticas y activas medidas en lo que concierne a la RSC, es decir, a la Responsabilidad Social Corporativa, esta conciencia que afecta a todas las empresas de cualquier ámbito y sector también afecta y atañe por supuesto a las empresas de mantenimiento de sistemas, pero, ¿en qué y cómo pueden contribuir estas empresas a la RSC?
Primero de todo diremos que la Responsabilidad Social Corporativa, dicho coloquialmente y de forma corta y sencilla no es otra cosa que aquella acción que emane de la empresa y que tenga una trascendencia positiva, un impacto social positivo a través de la actividad de la misma. Obviamente el camino de una empresa para ser responsable socialmente depende de una y cada una de las empresas, pues resulta imposible trazar el camino que cada una debe de seguir, pero el objetivo está claro: ser rentables y socialmente responsables.
Entonces la Responsabilidad Social Corporativa pasa por ejemplo en realizar políticas, en diseñar planes que a través de la acción de la misma permitan por ejemplo aportar un impacto positivo a la naturaleza, o que aporten ventajas a la sociedad a la que sirven como por ejemplo programas específicos de desarrollo de partes de la población desfavorecidas o excluidas, etc. Por supuesto la misma Responsabilidad Social Corporativa también atañe al mismo interior de la empresa, mediante las buenas prácticas directivas entre otras muchas consideraciones.
En resumidas cuentas, una empresa no es socialmente responsable simplemente porque lo diga o porque cree un pomposo departamento de RSC. Una empresa es socialmente responsable cuando, puede que igual sin gran pompa, departamento o anuncio, sea capaz de día a día aportar su granito de arena para dejar una sociedad mejor de la que se encontró ayer.
